¿Por qué escribimos?

Es una buena pregunta, no me lo neguéis.

Y si, te lo estoy preguntando a ti.

¿Por qué?

Mayoritariamente diremos que es un buen hobbie.

Una buena terapia.

Un buen trabajo.

Da igual que escribas por entretenerte o por dinero o por fama o por el motivo que sea.

Todos escribimos porque nos gusta.

Punto.

Puede que haya ocasiones en que no nos guste lo que escribimos. Pasa en los mejores trabajos. Pero el acto de escribir lo adoramos (aunque en ese momento este dándote empujones un perro para que le tires la pelota en vez de estar tecleando).

Eso es una verdad como un templo.

Escribimos porque nos gusta escribir.

Amamos escribir.

El simple hecho de sentarte delante del teclado o de una libreta ya nos hace felices.

Los demás motivos que tengas para hacerlo son secundarios.

Yo lo he dicho muchas veces.

A mi escribir me ayuda mucho. Me calma después de un día muy estresado. Me anima tras un día malo. Me despeja. Me quita las mil cosas de la cabeza que, a veces, se te agolpan, agobiándote.

La decisión de publicar lo que escribo también fue secundaria.

Pero creo que, aunque dejara de publicar, de postear en el blog… creo que jamás podría dejar de escribir.

¿No pensáis lo mismo?

Cambiando de tercio, doy por finalizado el experimento con Instagram tras veinte días. Creo que he podido demostrarme (si, esto era para convencerme a mi misma) que funcionaria para ayudar a vender libros, aunque con mucho más trabajo y cuidado del que yo he tenido. Y bastante más tiempo también.

Pongo los datos de esta semana.

• 7 días.
• Hastags españoles e ingleses mezclados. Mínimo de 6, máximo de 16.
• 8 fotos y 1 video. Mínimo de 5, máximo 15 likes.
• 4 ventas.

Los followers han bajado. Imagino que me puse plasta XD

Considero el experimento muy interesante. Seguiré usando la aplicación para esto, aunque ahora me la tomare en serio.

Y me despido esta semana no sin antes recordaros que las versiones digitales de Jack T.R. y Kamelot 2.0 siguen a un precio excepcional (0,99€) y que seguiré agradeciendo eternamente los comentarios, tanto en el blog como en la pagina de Amazon.

¡Besos!